Elysian TORRENT Pale Beet Bock
Todos los días, o casi todos, me tomo una cervecita cenando. Cervecita es un decir, la mayoría de las veces son botellas de 22 oz (650 ml) con más del 6% e alcohol. Otras veces, las menos, son botellas de tercio o cervezas ligeras (de alcohol, intento que nunca sean ligeras de sabor). Una de las cosas que he venido observando es que las cervezas que tomo por aquí nunca, o casi nunca, aparecen en las notas de cata de otros blogs en España. Así que he pensado ¿porqué no empezar mi propia sección de degustación de cervezas? Y ni corto ni perezoso, me he puesto a ello con la cerveza que he tomado esta noche: Elysian TORRENT Pale Beet Bock, que como su nombre indica es una cerveza con… ¡remolacha! ¿Para qué empezar con algo normalito?
Elysian Brewing Company es una cervecería de Seattle con tres pubs en la ciudad. Es un sitio por el que intento pasarme al menos una vez cada dos o tres meses para recargar las pilas, o mejor dicho, la nevera. Tienen una gran variedad de cervezas entre fijas y de temporada, y después tienen… Las doce cervezas del apocalipsis, de la que esta Bock es parte. Estas doce cervezas del apocalipsis son, según sus creadores, «una carrera de un año hacia el final de los tiempos según el calendario maya», y fueron saliendo cada día 21 de los doce meses de 2012. Muestran en sus etiquetas dibujos de la novela gráfica Black Hole de Charles Burnes, también de Seattle, e intentan aportar creatividad e ingredientes inusuales en cerveza. Y esto último sin duda lo consiguen.
Y ahora, vamos a por la cerveza:
- Alcohol: 7%
- Estilo: Bock (bueno, eso pone, porque no cuadra nada con lo que se supone que es una Bock)
- Fecha embotellado: desconocida
- Densidad original: desconocida
- Elaborada con remolacha en polvo
- Servida de una botella de 22oz. (650 ml) comprada en la fábrica hace aproximadamente un mes a un vaso tipo tulipán.

Elysian TORRENT Pale Beet Bock.Voy a tener que buscarme un sitio mejor para hacer las fotos que la mesa donde cenamos delante de la tele.
Tiene un color naranja cobrizo, más bien oscuro, con una generosa capa de espuma densa de color crema claro, casi blanco, que se mantiene en su sitio con facilidad y deja bastantes rastros en la copa cuando desaparece. En la etiqueta dice que es «roja como el fuego del infierno», pero yo no lo veo tan radical. El aroma es ligero, muy ligero. Empieza siendo a malta, más bien dulzón, sin apenas rastro de lúpulo y de repente se nota la remolacha, pero sin dejar de ser suave. Esperaba algo más radical en nariz, la verdad. El sabor empieza siendo amargo, la primera sensación de que hay lúpulo, pero pasa a dulzón rápidamente y ahora sí viene la remolacha que nos hace olvidar todo lo demás. Me gusta la remolacha, y sabía que la cerveza era con remolacha, así que ninguna queja en ese sentido. Termina ligeramente dulce pero sin dejar sabores extraños en la boca. Bastante limpia. La carbonación es media, al igual que el cuerpo. En resumen una cerveza original, pero para olvidar, nada especial. La volvería a beber si no hubiera otra cosa, no es desagradable ni me ha disgustado, pero tampoco nada del otro mundo. Probablemente demasiado predecible. Una cerveza con remolacha que sabe a… remolacha.
Nota final: 6/10
¡Salud!
Mira, una cerveza que no probaré…La remolacha es de los tres o cuatro alimentos que no como jamás, soy psicológicamente alérgico.
Salud!
No te pierdes mucho, la verdad. Y si no te gusta la remolacha… te lo ganas, porque no sabe a otra cosa 🙂
Estoy haiendo una cerveza con remolacha, a ver como me sale.. les contaré muy pronto. Salud2.